NUESTRO PERIÓDICO DESDE SU FUNDACIÓN EL 13/06/2010 AL DÍA DE LA FECHA

216.000 LECTORES EN 10 MESES

DÍA 13/05/2011- 3.240 ENTRADAS

NACIMOS LIBRES, SOMOS LIBRES Y CONTINUAREMOS SIENDO LIBRES

martes, 28 de diciembre de 2010

EL CHIRINGUITO 


PARA LA UNIÓN, PROGRESO Y DEMOCRACIA EL DEPORTE MELILLENSE ES UN ESCÁNDALO 

“Robles, lleva un chiringuito descontrolado, 
donde el dispendio y los favoritismos es la regla general”

Redacción: Unión, Progreso y Democracia, de la mano de su candidato a la presidencia de la Ciudad Autónoma en las próximas elecciones municipales, Emilio Guerra, considera que la gestión política del área de Deportes del ayuntamiento, es una de las “lacras más lamentables y perniciosas del gobierno Imbroda”.
El dirigente upedista, al paso de las recientes declaraciones del consejero Robles, que hablaba de una “supuesta excelencia” en cuanto a instalaciones deportivas, ha manifestado que desde la consejería se “carece de una política deportiva acorde a la ciudad, la demanda real de los ciudadanos y conforme exige el enorme presupuesto que manejan”. Guerra, subrayó ironizando que la “excelencia” está en “los grandes escándalos que genera Robles y sus amiguetes, así como el despilfarro de dinero público en subvenciones y convenios, mal concedidos y mal fiscalizados”. Hace tiempo, UPyD, solicitó la suspensión de cualquier subvención o convenio con la Federación Melillense de Fútbol, así como la apertura de un expediente tendente a la solicitud de reintegro de las anteriores aportaciones de dinero público a esa entidad conforme dispone el Reglamento de la Ley 38/2003, de 17 de noviembre, General de Subvenciones.
Desde UPyD, se considera “insostenible y caótica” la actual forma de dirigir el deporte melillense desde su perspectiva municipal. “Es un chiringuito, que se gobierna al capricho y antojo de Robles, que quita y reparte como le viene en gana”. Emilio Guerra, dijo que en cualquier ayuntamiento español, hace muchos años que se dejó de utilizar la fórmula de gestión directa que se lleva aquí. Precisamente, abundaba Guerra, “porque hay que poner en manos de profesionales y técnicos, a través de un órgano reglado, la gestión de los servicios deportivos y sus instalaciones”