Por: Pedro Gallardo
Menos mal que se prodiga poco
Efectivamente, menos mal, menos mal que se prodiga poco este “Culolamo”, aunque ahora verán vuestras Mercedes de la coñilengua y aguerrida lontananza como les alegra sus corazones con genuinas sinrazones o razones de buen cobrador. Y es que se les ve el plumero a estos practicantes de la bobaliconería, intentando darle la vuelta de 361 grados a sus subjetivas y mal intencionadas artes y análiticas de despecho y despacho, de papel de estraza en higiene de bajos de esfínter flojo.
Hay que exigir a Escobar deje el cargo en la Delegación a lo que se suma Conesa, Don Daniel, en sintonía de móvil pactada. Y lo hacen con amplio eco en el medio diario que controlan con el dinero de todos, intentando darle la vuelta de tuerca a una realidad que solo ven sus memedades y propios intereses, mantener la poltrona y las posaderas prietas a tanta seguridad e imagen proyectada. Bueno, reconduzco, pues no quisiera ser calificado con craso error, el personaje del seudónimo y escribano, sale cual topillo de su topera a lanzar sus arengas y venganzas, ante cualquier que osara moverle sus prebendas reverenciales, habiendo olvidado al caso, que si hablamos de republicanos, de derechas y ceda el paso que los hubo, además de serviles y nostálgicos, agradecidos y simplones acuartelados en la intriga y el despelote por versar, volviendo a menudo el menudín, según me cuentan, a hacer uso del papel de estraza en higiene de metralleta y compulsiva en bajos de esfínter nada flojos, por Newton, gravitatoriamente atraídos, a sus lindos pies, esquivados.
Y es que la fobia fóbica a todo bicho viviente que oposite, que enarbole reclamas de libertad, una democracia nada controlada por el régimen aclanado, es motivo de su santa devoción y echa por corrupta creativa, bilis y gargajos bien rumiados, edulcorando así su boca y expresiones de desigualdad de trato, y que cunda la prepotencia de los totalitarios mentales que le nutren sus bolsillos, incluidos los de la americana y el gabán alcanforado de su zaguán.
La alta gama de improperios y desdenes, abarca derechazos a Don Dionisio, izquierdazos a Mustafa, crochets a Zarrías con opercuts a Hernando, no salvándose “Los Emilios”, ni Don Ignacio por mucho se declare popular, lo malo “que en libertad”, y a nuestros “Verdes-Equo”, ya les vendrá el zafarrancho de combate no salvándose ni el delfín varado, si cabe a judicializar.
Y a este que profana su silencio y expresa sus diferencias, mejor no verlo o jugamos a las margaritas, y que lo decida el petalito ulterior en “par y nones”. Ahora me sale con que son unos desvergonzados por venir a Melilla a apoyar a los “imputados”, añado, “sin condena”. Y es que como se ve y palpa en el ambiente algunos adolecen de otros criterios de sana justicia, acordándose de la Inquisición, las hogueras y desarraigo para todo “mortal diferente”, en este terruño de cuatro posesos faltos de ternura y mestizaje con plebeyos, aunque vendan interculturalidad con sonrisa forzada al uso.
Y siguen machaconamente e impenitentes, minusvalorando la concentración manifestación del pasado Viernes, para ellos la de los “seiscientos”, nos siguen marroquinizando a todos lo que no seguimos “ el libro ideario del Pepete ”, pudiéndoles el auténtico pavor de que las cadenas de rompan y, recobremos esas libertades y esa dignidad en los que no nos vendemos. Llegará, llegará la cita, a ochenta días de vuelta a la Melilla propiedad de sus gentes, y el arco iris multicolor en refrescante lluvia de ilusiones, pondrá a cada uno en su lugar, en un expreso deseo, de quien escribe con nombre y apellidos, por pura honra. Salud de la buena, que no palabras.