Cubrimiento del cauce añadirá un riesgo potencial
en caso de grandes crecidas
en caso de grandes crecidas
“Es importante recuperar estos espacios para el uso y no cubrirlos tal y como quiere el actual equipo de gobierno. Los proyectos artificializantes que están proyectados son peligrosos en caso de riadas, son enormemente caros, no crean empleo y artificializan una zona natural”.
Entre esos proyectos está el techo al Río de Oro que se quiere realizar en el tramo final del cauce. El cubrimiento del cauce añadirá un riesgo potencial en caso de grandes crecidas, sobre todo por cuanto no se controla lo que pueda venir del país vecino como grandes masas de residuos que puedan taponar y levantar las planchas de hormigón, según anunciaba ayer Manuel Soria.
Usurpando a los vecinos
Por otra parte los entubamientos proyectados tanto en el Barranco de Cabrerizas como en el Barranco de Horcas, pretende urbanizar esas zonas, usurpando a los vecinos de barrios tan poblados como Reina Regente, Cabrerizas, Tiro Nacional y Monte Maria Cristina la posibilidad de disfrutarlas como zona verde una vez limpias y adecentadas.
“En este caso además supondría problemas de inundaciones en el centro de la ciudad ya
que, si bien en la actualidad no tienen problemas de absorción de agua de escorrentía, en
el momento en que se urbanice esa agua habría que evacuarla artificialmente pudiendo desbordarse la red de pluviales”
“Este tipo de proyectos artificializantes no tienen argumentos, ni urbanísticos, ni sociales, máxime en un escenario de crisis y con la gran tasa de paro de la ciudad, recordamos que estas obras las realizan en su inmensa mayoría personal de la Península y de Marruecos”.